Según el informe «Forest Declaration Assessment», mientras el mundo perdió 6,37 millones de hectáreas de bosque durante el año pasado —equivalente a 9,1 millones de canchas de fútbol—, Paraguay se destaca como único país que cumple objetivos contra la deforestación en 2023
En un contexto global preocupante de deforestación, Paraguay emerge como un caso excepcional al ser el único país, entre diez naciones en situación de emergencia, que logró cumplir sus objetivos de reducción de la pérdida de bosques en 2023. Este logro adquiere especial relevancia considerando que los bosques albergan el 80% de las especies terrestres de animales y plantas, y son cruciales para regular los ciclos del agua y retener el CO2, principal gas de efecto invernadero responsable del calentamiento global.
La situación es particularmente alarmante en varios países de la región. Bolivia ha experimentado un incremento del 351% en su tasa de deforestación entre 2015 y 2023, impulsado por reformas regulatorias que favorecen al sector agroindustrial, principalmente en los rubros de soja, caña de azúcar y ganadería. Brasil, aunque ha mostrado mejoras significativas en la Amazonía gracias a las medidas de protección implementadas por el presidente Lula da Silva, superó su límite previsto de 1,5 millones de hectáreas, alcanzando 1,94 millones en 2023.
En Asia, Indonesia representa el 65% de la deforestación del continente, con un preocupante repunte en 2023 debido a la explotación minera de níquel para baterías de vehículos eléctricos, la producción de materias primas «ecológicas» como la viscosa, y la expansión de grandes explotaciones agrícolas.
En este panorama, el éxito de Paraguay, junto con los avances notables de Colombia que logró reducir su pérdida de bosque primario en un 57%, demuestra que es posible implementar políticas efectivas de conservación forestal. Estos resultados son especialmente significativos considerando que estamos a solo seis años del 2030, fecha límite establecida en la COP26 de Glasgow para erradicar la deforestación, compromiso firmado por más de 140 países.
De particular preocupación es que 3,7 millones de hectáreas de selva tropical primaria, esenciales por su capacidad para absorber CO2 y la riqueza de su biodiversidad, desaparecieron el año pasado, manteniéndose en niveles similares al inicio de la década, cuando estas cifras ya deberían estar mostrando una reducción significativa para cumplir con los objetivos de 2030.
Datos clave:
-Paraguay: Cumple objetivos
-Bolivia: +351% deforestación desde 2015
-Indonesia: 65% de toda la deforestación en Asia
-Brasil: Mejora en Amazonía, pero problemas en Cerrado
Fuente: portal Barron’s