El sector político del Paraguay se enfrenta en estos momentos a una situación en la cual es imperativo para el desarrollo de la Nación priorizar la estabilidad, credibilidad y seriedad de la República por encima de intereses personales o sectoriales.
La ciudadanía necesita que sus líderes políticos hagan su parte con ética y transparencia para asegurar un escenario de desarrollo, trabajo y seguridad.
Exigimos, a todas las autoridades de la Patria, responsabilidad y prudencia en la toma de decisiones en este momento delicado.
La ciudadanía que en el día a día contribuye al crecimiento y bienestar del Paraguay, merece por parte de los tres Poderes del Estado previsibilidad, honestidad y transparencia en todas sus gestiones.
La coyuntura de crispación política, extendida por todo el país en la última semana, pone en relieve la necesidad de insistir en que para conocer la verdad hay que someter a un profundo escrutinio los hechos y analizar los detalles con tranquilidad y objetividad.
Si hay manejos dudosos, los involucrados deben asumir su responsabilidad bajo el imperio de la Constitución y las Leyes. Es justamente cuidando y fortaleciendo las Instituciones de la República que, sin caer en errores a los que pueden inducirnos pasiones exacerbadas por la coyuntura actual, encontraremos una solución que nos permita seguir creciendo en un escenario de prosperidad, creando oportunidades de desarrollo para todos.